Pergamino balompédico
Alex Carbajal Berber
Cristiano World Player
Cristiano Ronaldo ha sido galardonado, por segunda ocasión en su
carrera, como el FIFA World Player. El Balón de Oro de la Federación
Internacional supuso una pausa a los cuatro reconocimientos entregados a Lionel
Messi, de manera consecutiva, que coincidieron con la etapa mágica del
Barcelona de Pep Guardiola, para muchos el club más brillante de toda la
historia.
Lo del argentino no fue casualidad. En los cuatro años previos, a veces
con mucha diferencia, fue el mejor jugador del mundo en títulos conseguidos,
goles anotados y aportaciones a su club, e incluso en el último año peleó tanto
por el trofeo que, como hace mucho no sucedía, los cuestionamientos en torno al
mérito de Cristiano Ronaldo, de recibir este trofeo inundaron las páginas de
los periódicos del orbe.
Jugadores que fueron élite mundial en alguna ocasión, como el caso del
búlgaro Hristo Stoichkov, han cuestionado la veracidad de las votaciones de
este trofeo, y más de algún medio especuló sobre la concordancia de las
votaciones publicadas por la FIFA, y por las que verdaderamente habrían emitido
los capitanes y seleccionadores de los equipos nacionales.
El margen con el que ganó Cristiano Ronaldo es estrecho. Deberá
agradecer a su gestor de relaciones públicas, pues la campaña pro Cristiano se
desarrolló con el “timing” perfecto, justo cuando Lionel Messi se alejaba de
las canchas para recuperarse de una lesión.
Quien no tuvo los méritos suficientes, quizá porque su estrategia de
marketing no es tan sofisticada, y en lugar de anotar goles, los sirve, fue el
francés Franck Ribéry. El ganador de la Liga de Campeones de Europa tenía el
presentimiento de que su condición de jugador menos mediático era un hándicap
al momento de enfrentarse al monstruo de la mercadotecnia de CR7.
Lo cierto es que las lágrimas de Ronaldo, al momento de recibir el
Balón de Oro reflejan cierta obsesión. Sí, de no ser por Messi, llevaría más de
los dos balones dorados que ostenta, aun cuando no ha ganado ningún título
impresionable, en el último lustro.
Su palmarés era más agresivo en su etapa con Manchester United, y
dentro de lo que se avecina, se ve complicado que Portugal pueda conseguir el
título mundial en Brasil 2014, por lo que sus aspiraciones deberán centrarse en
la Copa de Europa, una décima para el Madrid que le permitiría aspirar a un tercer
Balón de Oro.
Messi ya hizo su pretemporada personal, a sabiendas que será la mejor
oportunidad de conseguir el ansiado campeonato mundial. Brasil o Alemania
podrían aportar algún jugador más a la lucha del siguiente año, según sus
resultados, dado que el tiqui-taca de España siempre ha evitado que los especialistas
se decanten por un solo jugador, incluso cuando Xavi eclipsaba a todos.
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