Pergamino balompédico
Alex Carbajal Berber
Por la décima
Las semifinales de la Liga de
Campeones de Europa confirmaron la presencia de cuatro clubes pertenecientes a
dos ligas que han competido durante el último lustro con la Premier League, por
ser las mejores del mundo.
Real Madrid y Barcelona, así
como Bayern Munich y Borussia Dortmund de la Bundesliga, han dejado duelos más
que interesantes, con la batalla que se dará entre los blaugranas y el próximo
club de Pep Guardiola, el Bayern, y entre
los madridistas y uno de sus “cocos”, el Borussia.
En Valdebebas hay una obsesión
tremenda por conseguir la décima Copa de Europa. Desde los destellos mágicos de
Zidane, en Glasgow, el Madrid quizá nunca se ha visto tan convencido de que
este ansiado título europeo es posible; sin embargo, y pese a la presencia del
último club de moda en el mundo, el Barcelona, el equipo favorito de los cuatro
restantes para lograr el título es el conjunto de Munich.
La final soñada para la UEFA y
los fanáticos es un Real Madrid frente a Barcelona, en Wembley. Los madridistas
sueñan que así sea, pues consideran que Mourinho ya le tomó la medida al juego
barcelonista; sin embargo, las posibilidades de que la final tenga un tinte
alemán, no son desmesuradas.
Ambos cuadros alemanes tienen
el potencial y los jugadores para estar por encima de los archirrivales
españoles. El Bayern, al momento, es una máquina ofensiva que podría no tener
igual en Europa. La característica de su juego le permite llegar rápidamente al
área, sobre todo, por los costados, aunque ciertamente sufrirá cuando el
Barcelona se adueñe de la pelota.
El Borussia es un cuadro que
se renueva cada temporada, y ya ha demostrado en varas ocasiones que puede
hacer sufrir al Madrid. Mourinho tiene la presión de la décima, justo cuando
resuenan los rumores de que no estará la próxima temporada entre los blancos.
Se habla de Chelsea, pero su obligación de hacer el mejor papel en lo que resta
de la temporada europea es proporcional al salario que le ofrecieron para que
consiguiera precisamente este trofeo.
Para la UEFA, pocas veces unas
semifinales de Champions habían sugerido
tanta expectación. La posibilidad de una final entre los máximos rivales del
futbol español es seductora, pero tendrá que pasar antes por una complicadísima
aduana alemana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario