sábado, 20 de julio de 2013

OPINIÓN

Pergamino balompédico

Alex Carbajal Berber

Lo dijo Teofilito…

Muchos parecen ofendidos y otros asqueados. Las declaraciones del delantero colombiano de Cruz Azul, Teófilo Gutiérrez, calaron hondo en el futbol mexicano, al expresar a medios de su país que si bien River Plate no puede pagarle tanto como el conjunto celeste, los Millonarios son una mejor vitrina en el escaparate mundial.

De inmediato las reacciones en contra. Algunos medios casi lo linchan, y Pablo Barrera, otro cruzazulino, no quiso quedar mal asegurando que los cuatro grandes del futbol mexicano están al nivel de River y Boca.
El problema no es que Teófilo se quiera ir al futbol argentino, el problema radica en el nivel de veracidad de sus palabras. Siendo sensatos, River Plate y Boca Juniors son el Madrid y el Barcelona del tercer mundo. Ambos clubes pasan por momentos grises, comparados con su dorado pasado, pero su grandeza se ha curtido por el prestigio de los futbolistas que han emergido de ahí, y la prosapia del mismo futbol argentino.
Además, Cruz Azul dista mucho de ser un equipo con mentalidad de cuadro grande, basta ver la forma en que perdieron la última final del futbol mexicano, un síntoma que asustaría hasta al más optimista.
Hay algo innegable. River seguramente no podrá pagar el fichaje del colombiano. En el balompié sudamericano hay un problema grave en la economía de los clubes, aun siendo grandes. Teófilo, que ya sabe lo que es jugar en esa liga, también se ve seducido por el recuerdo de algunos monstruos colombianos que se hicieron grandes con la camiseta de River, como Juan Pablo Ángel y Radamel Falcao, pero habrá que ver qué sucede con su carta cuando los Millonarios no puedan costear su compra. Mientras tanto, la sub-20 de los celestes.
Otros indirectamente golpeados son los directivos de la Liga MX. Acaban de firmar un acuerdo con BBVA Bancomer, por varios millones de dólares, y que un colombiano venga a decirles que pese a todos los cuentos, sigue siendo mejor vitrina el futbol argentino, debe ser un golpe al orgullo que no olvidarán pronto. Este golpe se suma al rechazo del ex artillero de Colón, Emmanuel Gigliotti, quien había firmado un precontrato con Pumas, y lo declinó para irse con Boca Juniors.    
Quizá los extranjeros no están tan locos. Pasa que mientras convencen a Bancomer de pagar millonadas por patrocinar la liga, hay cuadros a los que no se les respeta al ascenso (La Piedad), y equipos que pagan por ascender o permanecer (Veracruz, San Luis, Chiapas y Querétaro). Menuda contrariedad.


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