OPINIÓN

La Jiribilla

Dos y contando, San

Miguel bicampeón

de la Primera Amateur

Edwin Martínez

Armar un equipo competitivo en la máxima categoría del futbol en nuestro Estado, no resulta difícil, pues realmente un 50 o 60 % del total de jugadores de los 20 equipos, son trotamundos y se van con el mejor postor, torneo tras torneo, olvidándose por completo del equipo donde se formaron y que les dio la oportunidad de ser futbolistas y es que mire, viéndolo bien, si a usted le ofrecieran una buena cantidad de dinero por sólo firmar una temporada, más un bono cada partido y mejor aún, una prima por quedar campeón, en el nivel amateur, pues tonto el que no firme. Eso sí, sólo basta tener el capital suficiente para armar un trabuco de plantel y haber quién lo detiene.

Año tras año muchos jugadores pasan de un equipo a otro y al siguiente año, ya están en otro. A final de cuentas, ya no sólo importa jugar, ya importa sacar provecho, porque siendo honestos, la liga de la Primera División Amateur no ofrece ninguna recompensa económica por quedar campeón, pero la directiva de los equipos, sí.

Hablemos del actual bicampeón de la liga de fútbol de la Primera División Amateur, el club San Miguel, originario de Alcaraces, en el municipio de Cuauhtémoc, claro, sólo el equipo. Un club plagado de jugadores ex profesionales, que metiéndonos de lleno en la crítica deportiva, qué bien juegan. Por experiencia no queda, por calidad tampoco, mucho menos por idea, un equipo bien conjuntado que se entiende a la perfección, casi pueden tocar con los ojos cerrados y verlos es un deleite. No le diré que comparado con los demás equipos, valga la redundancia, no hay comparación. No hay ningún equipo que le llegue en plantel al San Miguel, ninguno. Y esto se da por dos cosas, el San Miguel es demasiado bueno y simplemente no ha habido un equipo que ponga en predicamento el accionar de los santistas, excepto en la final, donde en un gran lapso del partido el juvenil y dinámico conjunto de Barrio Alto le jugó al tú por tú y parecía que se podían llevar el cetro de campeones, no fue así.

Por su parte, los comaltecos dieron una agradable sorpresa en este torneo, lograron formar un plantel dinámico y sobre todo, de mucho joven que no rebasaba los 20 años, y mire que jugar en la Amateur a esa edad es un logro ya, aunque en la actualidad pudiera no ser sorpresa que a tan corta edad, se esté en deportes de alto nivel.

Salvador “Chava” Ruiz, con su peculiar estilo de dirigir y con su largo recorrido y vasto conocimiento en el futbol colimense, les imprimió a los muchachos, primero que nada, orden táctico. Era muy satisfactorio ver a los jóvenes jugar ordenadamente, con idea, con toque y siguiendo un esquema, no se “alocaban” ni mucho menos. Segundo, carácter. No se sentían amedrentados, pese a lo jóvenes que eran y mostraban de repente eso que todos nosotros concordamos, en que le hace falta a la selección mexicana, sí, eso.

Así pues, los dos conjuntos que mostraron el mejor accionar en el torneo, eran los dignos finalistas y para nada fue un partido avasallador, pese al marcador de 5-2 a favor de los de Alcaraces, los últimos 2 goles del San Miguel para finiquitar el partido, cayeron en la parte final, fue un ida y vuelta constante, con llegadas de los dos lados, con errores de los dos lados y sobre todo, con espectáculo para la gran afición que se dio cita en el estadio San Jorge.

En hora buena para Christian Aguirre, entrenador del San Miguel, por este bicampeonato logrado y si logra conservar la mayor parte del plantel, dejemos en puntos suspensivos lo que puedan seguir logrando.

Y felicidades también para el Barrio Alto, que demostró entrega y buen fútbol, pese a lo inexperto del equipo tan joven que presentó, un proyecto a largo plazo, que lamentablemente para sus aficionados, se verá mermado, pero a su vez, congratulados, porque gran parte del plantel se irá a jugar al flamante Comala FC, el equipo de Tercera División Profesional, que estará a partir del torneo 2013-2014, en el Pueblo Blanco de América.  HABLAMOS!!!