miércoles, 6 de abril de 2016

SUPLEMENTO CULTURIZANDO 
DEL PERIÓDICO
DIMENSIÓN REAL DE COLIMA

Arreola y el volcán



En Memoria y olvido, el escritor zapotlense definió a la erupción del Volcán de Colima como “una leve experiencia pompeyana”. Alrededor de ésta, y en general del coloso de fuego, giran muchos de sus textos, pero en particular en La feria hace un retrato despiadado e irónico de su pueblo natal y sus habitantes
Análisis “El Canario 
y la Máquina de Coser”



Cada vez estoy más seguro de que los mejores escritores contemporáneos se encuentran escondidos tras los nombres de “Independiente” o “Novel”, y cuando llegan a mis manos joyas como la que compete a este análisis/crítica, esa seguridad se transforma en orgullo de literato.
Gracias, señora




“¿Qué tal te fue en París?”. “¿Tu hija ya está en secundaria?”. “¿Sigues en la misma empresa?”. “¿Y eso que te cortaste el cabello?”. “¿Abriste la cuenta en Panamá?”. “¿Cómo sigue tu papá?”. “¿Cuántos años cumpliste?”. “¿De verdad sabes tocar guitarra?”. “¿Ya te repararon la computadora?”. “¿Tienes carro?”. “¿Dónde conseguiste harina?”. “¿Supiste que María y Pedro se separaron?”. “¿Estás por terminar el doctorado?”. “¿Cuánto te pagan?”. “¿Sigues practicando yoga?”. “¿Cuándo te casas?”. “¿Tienes afeitadoras?”. “¿Es flaco o gordo?”. “¿Dónde compraste ese vestido?”. “¿No me digas que te gusta planchar?”.
DESDE ALLO UNA HISTORIA 
NOS ESPERA España 1936.




Francisco Elizalde Martínez tenía 38 años cuando la guardia civil le rompió los brazos a golpes en el puesto de Los Arcos en el otoño de 1936.
En ese mismo instante decidió que ya era momento de morir. La lucha no terminaba, solo había comenzado, pero él además de quedarse sin brazos con los que trabajar, sin puños para golpear y sin dedos para señalar, se había quedado sin fuerzas y estaba solo.
MALCRIADO






-De veras que tú sí eres el mismísimo Anticristo. No sé qué estoy pagando contigo.
-Usted siempre con sus cosas, madre. ¿Cuándo se le va a quitar lo dramática?
¿FRAPPÉ?





El café de madrugada
esta frío,
el frío de la madrugada
grita tu nombre,
LAS AVENTURAS DE MAMÁ




El día de mí quinto cumpleaños le detectaron mi madre un cáncer y los médicos dijeron que le tenían que extirpar el útero. Fue un día muy triste.
Nos fuimos todos al hospital en el coche de papá y nos quedamos esperando hasta que el médico salió del quirófano con lágrimas en los ojos.
“EL SIGNO QUE SE FUE Y NO VINO”



Rajo las palabras para buscarte
bajo la coma que sigue rumiando el aire,
el olor del hollín destroza las venas,
la mujer de agua se ahoga en su lágrima.
Un día cualquiera

Hoy tuve un día de esos en los que sólo deseas regresar a la niñez,
a aquellos instantes en los que imaginar formas en las nubes que se movían,
lo transformaban todo en olor a fresa y sabor a regaliz,